23 de enero de 2009
Las histéricas somos lo máximo
De vacaciones de todo. Incluso de terapia. Así que para zafar un poco de la consulta de pedro recurro a otros especialistas. Liliana Felipe, por ejemplo. Magnífica canción, como muchas (muchísimas) de las suyas.
¡Las histéricas somos lo máximo!
Extraviadas, voyeristas, seductoras compulsivas
finas divas arrojadas al diván de Freud y de Lacan.
¡Ay Segismundo, cuánta vanidad!
¿Infantiloide y malsano el orgasmo clitoriano?
¡Ay Segismundo, cuánta vaginalidad!
el orgasmo clitoriano se te escapa de la mano.
Ay, Segismundo de tan macho ya no encaja
no me digas que el placer es pura paja.
Por lo demás correspondo a tus teorías
estoy llena de manías, sueños, fobias y obsesiones,
sólo tu envidia del pene y el diván de tus eunucos
administra mis pulsiones compulsivas.
Cómo me duele este mundo, Segismundo
la parálisis, la envidia, la neurosis nos gobierna
como me duelen los pobres, como jode la miseria,
ora si que lo de menos es la histeria.
Ay, Segismundo, ...
!Las histéricas somos lo máximo!
Solidarias, fabulosas, planetarias, amorosas
super egos moderados, cunnilingus para todas a placer...
¡Ay, Segismundo, cuánta vanidad!
¡Ay Segismundo, cuánta vaginalidad!
Ay Segismundo de tan macho ya no sé
si poner punto final, o ponerle punto G.
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 comentario:
cuando quieras...
Publicar un comentario